Hormigas trabajadoras
Las hormigas y el trabajo
La mayoría de especies de hormiga ciertamente son muy trabajadoras. Las obreras no dejan nunca de mantener sus tareas: buscar comida, limpiar el nido, asear y dar de comer a la prole y a la reina… pero, no todas las especies de hormigas siguen este régimen espartano de vida completamente dedicada a sus hermanas de colonia.
Existen algunas especies de hormigas parásitas que se aprovechan del trabajo realizado por otras especies de hormigas para no dar un palo al agua. Se trata de las hormigas esclavistas.
Las hormigas esclavistas dedican su vida a asaltar nidos de otras especies de hormigas para robarles la comida, los huevos y las larvas, que son trasladados a sus propios nidos. Las obreras que nacen de los huevos y larvas robados dedican su vida a servir a sus secuestradoras, ya que al nacer en la colonia de sus asaltantes, éstas piensan que son su familia legítima y las sirven con devoción hasta el fin de sus días.
En España existe una especie de hormiga esclavista, Rossomyrmex minuchae, una especie endémica de las cumbres del sureste de la Península Ibérica, que asalta nidos de otra especie endémica de hormiga: Proformica longiseta.
Así pues, no todas las hormigas son tan trabajadoras, algunas han encontrado la forma de escaquearse buscando otras obreras que realicen las tareas por ellas. Definitivamente, se han convertido en cigarras.